En estos días en el Tierno Galván y Miguel de Cervantes hemos apostado por el voleibol y por las acrobacias.
En voleibol aprendemos ha realizar los pases de antebrazos y de dedos. Los saques de arriba y de abajo nos salen de rechupete. Es un deporte grupal, colaborativo y muy enriquecedor, dónde la competición contra el otro equipo le da una chispa muy divertida.
Cuando empezamos las acrobacias nos daban un poco de miedo, pero eso solo fue el primer día.
Estamos solo ha mediados de mes y ya hemos aprendido la voltereta hacia delante, hacia atrás, el pino con la cabeza, con las manos y la rueda lateral.
¡Somos unos auténticos acróbatas!
Seguimos con nuestra rutina de calentar, practicar y jugar. Por cierto, no os lo hemos contado pero tanto deporte nos agota y siempre paramos un ratito para echar una merienda conjunta y reponer fuerzas.
Verónica.
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