Así quiero recordar que los niños deben vivir en paz y, para que eso ocurra, es nuestro deber enseñarles a ser tolerantes, confiados, justos, seguros, a apreciar a los demás y a sí mismos.
Y porque los niños aprenden lo que viven, somos los adultos que los rodean y en los que se miran los primeros que deberíamos vivir así .
No hay comentarios:
Publicar un comentario