Hacemos honor al hecho de vivir en la era tecnológica enfocando nuestra mirada hacia los orígenes y fundamentos del teléfono.
No necesitamos grandes presupuestos, límite de edad ni permiso de progenitores siquiera para tener un móvil propio.
Mirad qué chulo y qué bien funciona gracias a los vasos decorados y la tensión del hilo...
Juan.
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