
Érase una vez un vaso que quería parecerse al arco iris y que dentro de él se escucharan como cascabeles cuando lo movieran y así pudieran jugar los niños y niñas además de beber.
Pero también quería unirse con otros vasos y que estos niños y niñas les contaran secretos y rieran sin parar, y así su vida duraría más y sería más feliz.
Encarni.
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